La espirulina o spirulina es una de las algas más populares y es considerada un superalimento por ser rica en proteínas fáciles de digerir, vitaminas, minerales, ácidos grasos esenciales, ácidos nucleicos y clorofila.

La espirulina es uno de los alimentos de origen vegetal con mayor concentración de nutrientes. Aporta ácidos grasos poliinsaturados, omega 3 y 6, clorofila, proteínas vegetales, vitaminas A, B, C, D, E y K, fibra y minerales como, hierro, cobre, yodo, potasio, fósforo, magnesio, zinc y azufre.

Beneficios de la Espirulina

Es muy rica en melatonina, por lo que contribuye a combatir el insomnio.
Contiene fenilalanina, un aminoácido que reduce el apetito, por lo que es útil para dietas de acopio.
Es beneficiosa para la salud cardiovascular. Ayuda a reducir el colesterol y los triglicéridos, a mejorar la circulación y a disminuir la presión sanguínea.
Actúa sobre las postaglandinas consiguiendo efecto antiinflamatorio. Resulta útil para ayudar en casos como artítris o tinnitus (brunzits en los oídos).
Es un complemento antienvejecimiento debido a su concentración de antioxidantes como el betacaroté, beneficioso para la piel y los ojos. Su gran contenido de vitaminas, minerales y aminoácidos ayudan al crecimiento del cabello.
Ayuda a recuperar la forma física, aporta energía y vitalidad por lo que resulta útil en casos de anemia, agotamiento y desmineralización. Es apropiada para personas con un alto desgaste físico e intelectual.
Ayuda en el tratamiento de enfermedades causadas por déficits de proteínas, vitaminas, minerales y oligoelementos, contribuyendo al equilibrio de los mismos en el organismo.
Es rica en hierro fácil de absorber, por lo que contribuye a reforzar el sistema inmune y por lo tanto mejora las defensas y la producción de anticuerpos para combatir virus y bacterias.
Regenera la flora intestinal y activa los mecanismos celulares de desintoxicación, por lo que resulta beneficiosa para el hígado y los riñones. Ayuda a eliminar metales pesados y a suavizar los efectos secundarios de algunos medicamentos.
Debido a su contenido de clorofila, con una función similar a la de la hemoglobina de la sangre, tiene actividad antianémica.
Su alto contenido en proteínas hace que ayude a aumentar la masa muscular.

Cómo y cuándo tomar la espirulina

Si queremos perder peso tomaremos la espirulina media hora antes de cada comida con un vaso de agua. De esta manera, el alga produce un efecto saciante natural que nos ayuda a comer menos sin pasar hambre.
Si queremos ganar peso hay que tomar la espirulina justo después de la comida, junto con los postres.
Como tratamiento específico para un trastorno se toma en ayunas, media hora antes de ingerir ningún alimento.
Como suplemento nutricional se tomará en batidos verdes, elaborados con frutas y vegetales de hoja verde.

Podemos tomar la espirulina en polvo mezclado con agua o con alimentos, en cápsulas o comprimidos.

La dosis para empezar a tomarla es de 500 mg o 1 g, de 1 a 3 veces al día. No obstante, es recomendable consultar primero su ingesta con un médico especialista.

Es importante empezar por una cantidad baja por el alto poder depurativo y beber mucha agua durante el tratamiento, al menos un litro y medio al día, separado de las comidas.